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Miércoles, 30 de diciembre de 2009

Retablo de la vida de Cristo

En este retablo he estado trabajando durante dos años. En 65 tablas se recogen aspectos de la vida y del mensaje de Jesús que me han interesado y parecido importantes. Todas estas tablas están en el interior del retablo. En el exterior hay otras 65 tablas, basadas en el diseño de la cruz y de la estrella que, a modo de firmamento o cosmos infinito, se ven cuando las dos puertas del retablo están cerradas. Preparan y arropan la visión del interior donde se desarrolla de hecho la vida de Cristo.
En la primera fotografía se ve el retablo cerrado. Mide 187 cm de alto, 193 cm de ancho y tiene una profundidad total de 25 cm. En la actualidad está montado sobre unos soportes con ruedas que facilitan su movilidad. En su ubicación definitiva debería ir montado sobre un mueble que, a modo de pequeño altar, lo levante del suelo lo suficiente a la par que lo realce.


En la segunda fotografía se aprecia el retablo abierto. Aquí están las 65 tablas. 45 narran aspectos de la vida de Jesús. Miden 32 x 30 cm y la técnica usada ha sido acrílico sobre madera. 20 tablas, las del lateral izquierdo y derecho, son más estrechas (15 x 32 cm). Representan personajes importantes en la vida de Jesús (por ejemplo: María, José, Pedro …)
En las dos puertas laterales, en las tablas de formato cuadrado, se narran aspectos cronológicos de su vida. En la puerta de la izquierda, de izquierda a derecha y de arriba a abajo: 1. Salutación angélica, 2. Anuncio de la encarnación, 3. Nacimiento, 4. Adoración, 5. Bautismo, 6. Tentaciones, 7. Primeros discípulos, 8. Elección de los doce, 9. Sermón de la montaña, 10. Sermón de la llanura.
En la puerta de la derecha, de derecha a izquierda y de arriba a abajo: 11. Transfiguración, 12. Unción en Betania, 13. Entrada en Jerusalén, 14. Entrada en el Templo, 15. El lavatorio de los pies, 16. Santa Cena, 17. Jesús ora por los suyos, 18. Oración en el huerto, 19. Proceso ante el sanedrín y 20. Muerte.
En el cuerpo central del retablo he representado aspectos intemporales o acronológicos de la vida y el mensaje de Cristo. En el centro de este cuerpo y de todo el retablo se representa la crucifixión. En el eje vertical de este cuadro, hacia arriba, se representa la resurrección y la ascensión; hacia abajo la sepultura y el anuncio del ángel de su resurrección.
En el eje horizontal que sale de la crucifixión se han representado 4 momentos importantes del Jueves Santo. A los lados del crucificado, la eucaristía; más hacia afuera la despedida de Jesús y el mandamiento nuevo.
En el resto de los cuadros de este cuerpo central se han representado en la parte superior signos y señales (milagros) y en la parte inferior enseñanzas y mensaje (parábolas).

En la tercera fotografía vuelvo a colocar el retablo cerrado conmigo mismo para que se aprecie el tamaño y las proporciones del conjunto.

En la cuarta fotografía se aprecian nueve tablas del centro del retablo. Debajo de cada pintura, en el listón en el que parece que apoyan, está escrita la escena que visualmente contemplamos. Por ejemplo, la pintura de arriba a la izquierda tiene el siguiente texto escrito en la moldura: “El paralítico curado”. Se ha escrito de una manera sutil para que se pueda leer a 1 metro o dos de distancia, pero pasa desapercibido a media distancia.

En las siguientes fotos se reproducen tablas individuales. Esta primera es la escena 7: “Primeros discípulos”


La pintura siguiente es el sermón de la llanura.


Esta imagen es la “Transfiguración”


Aquí está “La entrada en Jerusalén”

En el cuadro siguiente se ha pintado un milagro: “La tempestad calmada”


Y en el último se recoge una enseñanza: “Buenos y malos frutos”. Jesús habla de que “el hombre bueno saca el bien del buen tesoro de su corazón”.

Esta es la última entrada del año. Me he quedado exhausto (siendo yo tan parco en palabras habitualmente…)
La esperanza, para el año que viene u otros no muy lejanos, es que esta obra encuentre su ubicación. Feliz 2010.
Se me olvidaba. Doy las gracias a quienes me han ayudado en la gestación y realización de este trabajo, especialmente a Jorge Guerrero Cucalón, Amando Carabias María, Marciano Cuesta Polo y Pilar Guerrero Becerra.